Recomendaciones para los jóvenes que desean ingresar a la Pyme familiar

Muchos expertos en empresas familiares sugieren que trabajar fuera de la empresa familiar, antes de hacerlo en ella, es una buena idea. Esto proporciona experiencia y credibilidad, demostrando a los empleados no familiares que tenés la valía suficiente como para ser contratado (y ascendido) en la empresa familiar cuando ingreses.
También, si elegís sabiamente tu asignación fuera de la empresa, podés aportar habilidades y conocimientos externos. Sin embargo, trabajar fuera de la empresa no garantiza una transición sin problemas, y para algunas personas, esta opción no es viable.
Entonces, ¿qué más podés hacer para ganarte tu lugar y dejar de ser “el bebé” de la empresa cuando ingreses al negocio familiar?

Aquí van algunas ideas cuando ingreses a la empresa de tu familia:

• Elegí trabajos desafiantes.
• No aceptés solo tareas fáciles.
• Asegurate de haber trabajado en las áreas más críticas del negocio (por ejemplo, ventas, atención al cliente, etc.).
• Llegá temprano y quedate hasta tarde (no actués como si tuvieras “derechos” por ser el “hijo de…”).
• Pedí la opinión de empleados más capacitados y con más antigüedad.
• Recibí un salario acorde a la misma escala que otros empleados con puestos similares.
• Participá en el proceso anual de evaluación del desempeño, si tu empresa lo tiene.
• Conocé a los clientes clave y otras partes interesadas (bancos, abogados, agentes de seguros, etc.).
• No ofrezcas demasiadas opiniones al comenzar a trabajar en la empresa.
• Hacé preguntas inteligentes.
• Demostrá liderazgo fuera del ámbito empresarial (comunidad, deportes, ámbito académico).
• Buscá un lugar en el que puedas destacarte.
• Creá tu propio nicho de especialización en la empresa.

Aunque nada puede hacer que ingresar al negocio como un miembro joven de la familia sea fácil, demostrar tu valía y dar un ejemplo de dedicación al negocio contribuirá en gran medida a ganarte el respeto de los demás empleados.